“Alacrán” Berchelt y “Pollo” Aguilar acabaron con sus rivales por la vía del nocaut

28 junio 2020

Los dos becarios RING TELMEX-TELCEL, el campeón mundial superpluma, Miguel “Alacrán” Berchelt y el gran prospecto, Omar “Pollo” Aguilar, se apuntaron nocauts en sus respectivos compromisos, anoche en la Ciudad de México.

Berchelt, en duelo fuera de título, tuvo que remar durante seis rounds para terminar por la vía del nocaut técnico sobre el valiente sinaloense, Eleazar “Tronco” Valenzuela, en batalla programada a diez giros en peso ligero.

Se antojaba para que el duelo se acabara en dos o tres rounds, sin embargo, Valenzuela demostró que tiene una gran resistencia al soportar brutal castigo en lo que duró la contienda.

En el mismo primer round, el campeón del mundo trató de terminar la pelea conectando buen repertorio de golpes arriba y abajo y en los últimos segundos para terminar el episodio conectó una poderosa izquierda que hizo caer a Valenzuela a la lona. El réferi le aplicó la cuenta de protección y lo dejó continuar pero tocó la campana.

A partir de ahí, Berchelt fue dueño y señor de la pelea, metía golpes por todos lados, sin embargo el “Tronco” resistió como un verdadero héroe, incluso, el “Alacrán” daba muestras de desesperación por no terminar la pelea, además de cansancio.

Fue hasta el sexto round cuando después del primer minuto de pelea, Berchelt logra meter una poderosa derecha sobre el rostro del “Tronco”, seguida de una poderosa izquierda a la quijada que le hizo perder el tono muscular corporal y cuando el “Alacrán” se fue con todo, el réferi César Castañón, paró la pelea muy oportunamente.

“POLLO” NOQUEADOR

Al también Becario RING TELMEX-TELCEL, Omar “Pollo” Aguilar, le bastaron 55 segundos del primer round para vencer al experimentado Dante “Crazy” Jardón, en duelo pactado a diez giros en peso superligero.

Parecía que Jardón le daría más batalla al “Pollo”, pero de pronto éste metió una poderosa derecha que hizo retroceder a Jardón y ahí fue cuando Aguilar aprovecho para ametrallarlo y ya cuando este estaba aturdido, el réferi también intervino para certeramente parar la contienda.

¡Felicidades becarios!