“Zurdo” Ramírez por título del mundo
Abr 04, 2016El Becado RING TELMEX-TELCEL Buscará Derrocar al armenio Arthur Abraham, Campeón Supermedio de la OMB.
Ya son años de estar en las filas de RING TELMEX-TELCEL, prácticamente desde el inicio de su carrera, y ahora, el mazatleco Gilberto “Zurdo” Ramírez buscará ser el campeón mundial número doce de este programa que dio inicio en el 2008, gracias a FUNDACIÓN TELMEX-TELCEL.
Ramírez irá en pos del título supermedio de la Organización Mundial de Boxeo, que tiene en su poder el armenio Arthur Abraham, en un duelo que se llevará a cabo en el Grand Garden Arena, en Las Vegas, Nevada, en la misma velada boxística que encabezan el astro filipino Manny Pacquiao frente a Timothy Bradley.
Ramírez, de 24 años, que inició su carrera boxística en el 2009, llegará a este duelo con una marca sin mancha de 33-0, con 24 nocauts, mientras el monarca del orbe, de 36 años, presentará cartas credenciales de 44-4, con 29 nocauts.
Los números revelan que este duelo terminará antes de completar la ruta completa de los 12 asaltos, pues los dos peleadores tienen TNT en los nudillos y en cualquier momento puede estallar.
“Estamos cruzando los dedos para que Ramírez se coroné en Las Vegas el próximo sábado. La pelea, ni duda cabe, será muy difícil ya que Abraham fue campeón mundial medio y ahora supermedio, además tiene más de 20 peleas de campeón del mundo. El es un peleador muy experimentado, por lo que Ramírez tendrá una batalla complicada, pero puede ser la noche de su consagración”, expresó el doctor Rogelio Herrera Echauri, director de RING TELMEX-TELCEL.
El “Zurdo” Ramírez ha hecho una gran preparación para este compromiso y llega con una gran ilusión de ser el nuevo campeón mundial de RING TELMEX-TELCEL. Además, el marco de esta velada boxística es inmejorable para demostrar que lo que los especialistas han dicho de él es cierto.
La moneda está en el aire y ya solo es cuestión que tanto el campeón del mundo como el becado RING TELMEX-TELCEL suban a la báscula el próximo viernes, y al día siguiente se vean las caras sobre el encordado para despejar la incógnita.